Esmeralda M. Paladini

Aun que todos digan que las rubias son tontas, Esmeralda rompe ese estereotipo ya que es inteligente y a simple vista, la chica perfecta para cualquier hombre. Demasiado madura para la edad que tiene, ya que se crío sin padres y en un ambiente familiar distinto; y eso le a echo volverse, una mujer fuerte y sincera, en todos los aspectos de la vida. Siempre tiene la última palabra y nunca se calla ante las cosas que no le gustan; es posiblemente la mujer más sincera.
Le gusta mucho su aspecto es por eso que siempre le gusta ir bien arreglada y no salir sin antes maquillarse.
En los estudios siempre a sido una alumna diez, ya que le encanta estudiar y aprender nuevas cosas, al igual que leer, se puede llegar a tirar horas delante de un libro sin cansarse. Ya que es una de sus pasiones; le da igual que sea de terror, romántico, suspense… Es la única vía de escape que tiene cuando se siente sola.
Romántica es decir poco, cuando tiene una pareja la cuida como si le fuera la vida en ello, es por eso que siempre sale herida de las relaciones fracasadas, ya que se implica demasiado en los hombres.
Le gusta cuidar su aspecto físico, es por eso que al no tener demasiado dinero para ir al gimnasio, sale a correr cada día una hora como mínimo, para mantener el físico. A pesar de ser una chica educada, lo que también le gusta demasiado es salir de fiesta y bailar; hasta que su cuerpo diga basta.
No es rencorosa, ni tampoco es que se enfade demasiado con la gente, ya que no le gusta tener enemigos, pero en esta vida no te puedes llevar demasiado bien con todo el mundo, es por eso que si le haces daño, saca el carácter que tiene, y puede ser peligrosa, quizás una de las personas más peligrosas; ya que se le nubla la vista.
Trabajadora como la que más, se implica siempre demasiado en todos sus trabajos y en todo lo que le gusta, siempre esta poniendo empeño, ya que siempre trata de conseguir sus sueños.

Esta historia empieza unos veinticinco años atras. Annette era una joven de clase alta italiana, que lo tenía todo. Era guapa, inteligente y rica. Pero en su historia, no todo fue de color de rosa; un día conoció a Abraham, un joven de clase obrera estadounidense, que se había ido a vivir a Italia para encontrar un buen trabajo. Se enamoraron y empezaron a salir, como toda historia de amor, al principio todo era bonito, pero cuando sus padres conocieron al chico, no vieron su noviazgo con buenos ojos. Pero eso a ellos no les importo lo más mínimo; fue por eso que la herencia y las riquezas que Anne poseía peligraban, pero aun así seguía sin importarles nada.
Al año de conocerse decidieron casarse e irse a vivir juntos; fue en ese momento que los padres de Anne la desheredaron, y no volvía a saber nada de sus padres ni de su dinero.
Paso un año y sus vidas no podían ser más perfectas, lo tenían todo y no necesitaban nada más, bueno si, les faltaba algo, más bien alguien a quien poder dar todo su amor. Es por eso que ese mismo año nacía la pequeña y mimada Esmeralda.
Todo era rosa para ella, aun que no tenían mucho dinero y el poco dinero que procedía era a base de trabajar, todo lo que la pequeña quería lo tenía.
Aun que todo era perfecto, el destino jugo una mala pasada con Abraham y Annette, cuando con solo diez meses de vida de la pequeña Esme, tuvieron un accidente que les costo la vida.
Esmeralda era una pequeña bebe de diez meses que se había quedado sola, y como sus padres no tenían contacto con ningún familiar, y nadie sabía de la existencia de la pequeña, esta fue llevada a un centro de acogida, donde estuvo hasta la edad de diez años, donde una familia de Nueva York la acogió y donde más tarde la criaría como a una hija más.
Vivía en un pequeño barrio de la gran manzana, con la familia Jones. Aun que fue criada como una hija, jamás acepto que le cambiaran los apellidos ya que no quería perder sus raíces italianas. Fue a buenos colegios aun que no muy caros, ya que la familia Jones, tenían más hijos a su cargo y no podían llevar a todos a buenos colegios.
Cuando cumplió los dieciocho años y ya siendo mayor de edad, se puso a investigar muy de cerca de su familia biológica, quería saber que era lo que había pasado y el porque ella estaba donde estaba. Fue entonces donde después de buscar y buscar, los encontró y con diecinueve años viajo a Italia, a conocer a sus abuelos.
Para todos fue un shock el que ella apareciera ya que la noche a la mañana tenían una nieta/sobrina. Sus abuelos maternos le quisieron dar todo después de que se enteraran quien era, pero ella lo renunció ya que no quería nada que viniera de ellos, ella tan solo quería saber quien era, nada más.
Volvío a Nueva York, donde ahora esta estudiando la carrera de Medicina. También trabaja de camarera en un prestigioso bar, para ayudar a su familia a salir adelante.